Rosales Trepadores

Los rosales son plantas que destacan en nuestros jardines tanto por sus colores como también por sus delicadas fragancias.

Las rosas trepadoras producen ramas, cañas, largas y flexibles que necesitan estar aseguradas para cubrir los enrejados o las pérgolas, no poseen zarcillos como otras plantas que también se incluyen como trepadoras.

No son parras, como las hiedras, las clemátides o glicinas. Carecen de la capacidad de aferrarse a soportes por sí mismas y necesitan medios de sujeción para mantenerse erguidas.

Si bien la creencia popular es que las rosas son plantas difíciles de cultivar y mantener, lo cierto es que luego de enraizar los rosales trepadores pueden permanecer durante muchos años en el jardín. Rosas-arbustivas

Durante los primeros años, se deja crecer la planta para que alcance una altura considerable, para cubrir el enrejado o para cubrir la pérgola. Luego se despunta para dar lugar al desarrollo de brotes que van a formar las ramas principales.

La poda anual consiste en recortar de 3 a 5 yemas, suprimiendo los brotes débiles. Cuando las ramas principales dan pocas flores y envejecen se las reemplaza paulatinamente por ramas más jóvenes y vigorosas.

El rosal trepador pertenece al grupo de rosas modernas.

Tanto las rosas antiguas como las modernas tienen trepadoras, las cañas de los arbustos crecen largas y flexibles, mucho más que las de los reconocidos arbustos.

Se reconocen tres tipos de rosas trepadoras:

Con flores grandes. Flores iguales a las de rosas arbustivas. Con flores pequeñas y abundantes. Con una sola floración en ramillete, muy abundante por año (primavera)

¿Mucho o poco sol?:

Además de cubrir pérgolas y enrejados son muy apreciadas en macetas y jardineras en balcones amplios y terrazas.
En donde el clima es seco y caluroso, estas plantas florecen mucho más acortando su vida, especialmente si no tienen su periodo de descanso.
Suspendiendo el agua, entran en letargo, pierden las hojas para volver a florecer en otoño.

Las rosas necesitan sol para crecer y florecer, sin embargo existen variedades que lo hacen con menos de seis horas de exposición diaria incluso en zonas áridas y con mucho sol, estas plantas necesitarán algo de sombra.

Zepherine Drouhin: flores dobles rosadas. (1868) Es una planta fuerte, crece como arbusto o adaptarse para crecer sobre una pared con algo de sombra. Posee ramas largas casi sin espinas. Produce abundantes floraciones a partir de la primavera.

New Dawn: flores rosadas (1930). Florece en madera vieja, se poda luego de su floración. Produce ramas de hasta 6metros de largo. Flores suavemente perfumadas.

Blossomtime: Flores grandes rosadas, dobles muy perfumadas. Ramas de hasta 4metros de largo.

Lavanda Lassie (Alemania 1960) Flores muy perfumadas, color púrpura, crece en racimos. Ramas de hasta 3,5metRosas-amarillasros. Crece mejor en zonas templadas.

Aloha: (1949) Planta trepadora híbrida de té. Tolerante al viento y la sombra parcial. Flores grandes dobles, muy perfumadas de color rosa y revés más oscuro. Alcanza los 3 metros.

Baño de oro y Sirena: trepadoras de flores amarillas, tolerantes a sombra parcial.

Ciudad de York, Rubor de Doncella: Flores blancas. Sombra parcial.

Plantación de rosales:

• Elegir la ubicación: sol, media sombra según sus necesidades.
• Asegurar que se disponga de suelo bien drenado y el espacio necesario para el buen desarrollo de la planta. En todos los casos la mala aireación favorece el desarrollo de hongos y enfermedades. Son plantas que requieren varias horas de luz solar directa y algo de sombra por la tarde.
• Los rosales se plantan lejos de arbustos grandes porque competirán por el agua.
• Antes de plantar retirar todas las hojas en mal estado.
• Si es a raíz desnuda, las raíces se ponen en remojo antes.
• Si se va a plantar de recipiente, quitar la planta del contenedor en forma suave, sosteniendo la planta y moviendo hacia un lado y otro para aflojar la tierra sin dañar las raíces.

• Cavar el hoyo de plantación varios días antes.
• Los rosales prosperan con niveles de pH entre 5,8 y 6,8.
• Agregar turba si es alcalino ó cal si es muy ácido.
• Los rosales trepadores se plantan en primavera temprana, después de las heladas.
• Cavar el hoyo a distancia suficiente como para que luego tanto la parte aérea como las raíces se desarrollen sin interferencias.
• Coloca la planta en el hoyo de modo que los brotes queden por arriba del nivel de suelo. Sostener la planta mientras se rellena el hoyo con sustrato suficiente.
• El hoyo de excavación tiene aproximadamente 35 cm de profundidad, depende de la planta y el mismo ancho que la parte aérea. Si se planta un ejemplar a raíz desnuda, hacer un colchón de buen sustrato, colocar la planta y rellenar.
  En cambio las de macetas, se ponen directamente y luego se rellena.
• Siempre se riega la planta trasplantada. Regar a intervalos para que las raíces absorban el agua, y luego al finalizar alrededor de la base.
• Formar un círculo con abono alrededor de la planta y establece una línea de contención de agua para mantener la humedad mientras la planta se establece.
• Regar cada dos o tres días de modo profundo para llegar a las raíces, sin saturar o encharcar.
• Remover durante los primeros días el abono alrededor de la planta para que se incorpore. (o bien fertilizante de liberación lenta) Al regar en profundidad, en forma espaciada, las raíces crecen en profundidad favoreciendo el enraizamiento.
• La planta de rosas tiene que quedar asegurada a su soporte de manera firme pero no rígida.
• Retirar hojas, flores, pimpollos marchitos, manteniendo siempre limpio y esponjoso el sustrato.